La Ciudad de Aurora ha visto un notable crecimiento en los últimos años. Es hogar del mayor desarrollo de ciencias de la salud de la región de las Montañas Rocosas y la base militar de más rápido crecimiento en los EE.UU. Posee una próspera comunidad de pequeñas empresas y atrae a una población profundamente diversa de residentes con un rico historial de apoyo a la comunidad y orgullo. Imagine esta ciudad con un sistema escolar próspero que capitalice ese notable crecimiento y rica demografía. Aurora se encuentra en un momento crítico; puede surgir en las próximas décadas como una de las grandes ciudades del Oeste. O bien, puede estancarse y aquellos con trabajos de altos salarios se trasladarán para trabajar, pero vivirán en otro lugar, llevándose con ellos los recursos generados en la comunidad local.
Ahora es el momento para que Aurora examine el estado de sus escuelas. Las grandes ciudades y comunidades requieren de grandes escuelas. Sin embargo, de acuerdo con el Departamento de Educación de Colorado, las Escuelas Públicas de Aurora (APS) han sido uno de los distritos escolares de peor rendimiento en el estado al menos durante cuatro años, y se enfrentará a una pérdida de acreditación si no mejora. Incluso sin la intervención del Estado, está claro que el distrito debe comenzar el duro trabajo de mejorar drásticamente las escuelas, para que los estudiantes puedan aprender y prosperar, y para que se creen canales educativos y laborales dentro de la comunidad. Los estudiantes de Aurora deberían poder acceder a puestos de trabajo creados en la comunidad, y ganar un salario digno.
Para el año 2020 más del 70% de los nuevos puestos de trabajo a lo largo del Front Range requerirá de un título o certificado de educación superior; sin embargo, sólo el 10% de los estudiantes de Aurora recibirá el título o certificado necesario para estos trabajos. Y en todos los indicadores estos números están empeorando: los índices de competencia en todas las asignaturas están disminuyendo. Sabemos que no tiene por qué ser así. Aurora puede crear un sistema escolar donde las familias elijan activamente sus escuelas por sobre las escuelas de otros distritos. Hay comunidades de todo el país con una demografía similar y menos recursos comunitarios que han transformado sus sistemas escolares. Aurora también podría ser un ejemplo, pero en primer lugar, la comunidad de Aurora y el distrito escolar deben forjar un camino para mejorar las escuelas.
Durante demasiado tiempo Aurora ha sido descuidada en las conversaciones acerca de la mejora de la educación pública. En vez de eso, las personas han concentrado sus esfuerzos de atención y mejora de las Escuelas Públicas de Denver (DPS), ignorando los desafíos y el creciente número de estudiantes de los márgenes de la ciudad. La atención tiene que cambiar; luego de Denver, Aurora alberga el mayor número del estado de escuelas que fracasan en un mismo distrito, y de algunos de los logros académicos más bajos del área metropolitana. Entre todos los estudiantes en Aurora, y más dramáticamente entre los estudiantes de bajos ingresos y de color, los índices de competencia están disminuyendo. Poco más de la mitad de los estudiantes de Aurora se graduó de la escuela secundaria. Menos de la mitad de los estudiantes de secundaria se sienten seguros en la escuela. El personal del distrito escolar no siente que el distrito tenga una visión del éxito de los estudiantes.